---x--- El más ambicioso proyecto: clasificar a la totalidad de la juventud argentina ---x---

2 de julio de 2009

Acá está la tapa (no te la olvides: roja con un chino)


Comprá este libro en FABRO - Nicaragua 4677

En Prohibido fu-marx encontrarás:

1) La puta social (reloaded). Segunda parte del comic trash sobre militante social que resulta ser una puta.

2) Mapa clasificatorio de la juventud argentina. Tratado de socio-poesía que traza las 53 categorías en que se acomodan los jóvenes argentinos. Snobs elitistas, cool esteticistas, bohemio freaky psicodelico, lumpen mochilero y mucho más...

3) Cuando se cuenta mal la historia parece más real. Ucronía visual sobre el Estado de Israel fundándose en Europa del Este.

4) Marxist park. Género comic. Cientista social reconstruye con material genético de un obrero del siglo XX a la clase trabajadora como aparece en los libros de Marx.

Algunos tipos de chetos (puede ver más en mi libro)


Nuevo rico de barrio cerrado/ country: su alto linaje no resiste la revisión hacia atrás en dos generaciones. Hijo de modelos, actores, futbolistas, empresarios de la noche, gente acostumbrada a la plata rápida y los flashes de suerte. Nueva fauna de Zoo’s de Cristal, de escasa orientación geográfica y peor orientación social y cultural. Espécimen del laboratorio social de la falsa seguridad, inadecuado e inadaptativo cuando llega el momento de abandonar el hogar.

Cheto aspiracional (sin guita): persona cuyas aspiraciones de ascenso social lo mueven a reproducir y escenificar los modos y costumbres de los chetos de verdadero status social. Su más limitada capacidad económica es compensada con un plus de chetaje. Seres extremadamente fálicos, ostentadores de dinero cada vez que pueden, autos y joyería. Necesitado aún más de elementos de distinción dada su circulación por barrios y escenarios más “plurales” que aquellos en los que habitan los chetos de guita.

Cheto banana/ grasa: estereotipo de cheto propio del Tercer Mundo. A diferencia de lo que sucedía con la formación clásica y humanista de la nobleza tradicional, en el cheto grasa la capacidad económica y el status social no son acompañados por una inmersión en la cultura y el refinamiento. Por el contrario, su valoración superficial de la acumulación de objetos materiales lo aísla de una dimensión de riqueza simbólica y espiritual y lo pone al acecho del pésimo gusto que tan bien ejerce.

Algunos tipos de Lumpen (podrá ver más en mi libro)


Lumpen malabarista: excluido del trono auténtico del arte, él reivindica esta condición y pertenencia con un plus de autoidentificación a los valores y los modos de lo estético. Psuedoartista engreído y de poca cultura, comportándose como un perro o un bebé cuando le toca ser público: incapaz de comprender y disfrutar aquello que no es colorido ni está en movimiento.

Lumpen místico/new age: artesano de las ilusiones y parásito al servicio de la gente débil que acepta su vida coordinada por los astros. Inclinación por abusarse de abstracciones como la energía o la onda que lo colocan en un campo alado con olor y gusto a lavanda. Desdeñador de la racionalidad y la instrumentación en su sentido positivo, el místico new age realiza tan poco como se lo indica su destino.

Lumpen artesano/hippie: gárgola que pretende que el mundo valorice su alambre de púa, abanderado del mal gusto de los duendes y los atrapa sueños; sobreviviente de la piedad y la confusión de los otros que se dejan cautivar por cuentas y dijes cuando son sacadas del contexto de las calles del Once. Señores que alimentan el abastecimiento fácil y el sacrificio ajeno, si abandonasen sus mochilas podrían volar más rápido.

Algunos tipos de Bohemios (podrá ver más en mi libro)




Cool esteticista: persona de conciencia mayor a la de un cheto que en busca de la distinción estética y el gusto refinado, no cede ante la posibilidad irritante de que otros lo identifiquen como un hippie. Abundan estos sujetos en los festivales de cine independiente, los eventos del gobierno de la ciudad y los pubs lesbo-cool de Capital Federal. Orgulloso y confiado en su minimalismo de expresión, atraviesa el aire convencido de que una buena imagen lo resguardará de la suciedad del mundo.

Intelectual snob elitista: hijo intelectual del snobismo elitista de la carrera de Filosofía o Letras, este micro-mundo le confiere un soporte simbólico tan fuerte que sólo puede abandonarlo si sus genitales son absorbidos por una maestría en una universidad francesa. Minucioso y detallista en la elección de palabras, pues un par de imprecisiones podrían volcarlo a la exclusión perpetua del escenario de sus valores. Asiduo lector de Heidegger y de otros tipos con peor onda.

Nati, la chica progre: frecuenta las ferias de Chacalermo con sus alforjas y sus anteojos retro, intentando acercarse lo más posible al núcleo íntimo de la verdad étnico-alternativa. Principista que siempre entrega monedas a los pobres y a la hora de votar lo hace por Pino Solanas, quien encarna mejor que nadie la dignidad nacional -clase media profesional. Es posible encontrar también a Nati en talleres de Danza Butoh del C.C. Rojas o veraneando en Cabo Polonio.

Bienvenidos a Prohibido fu-marx

Yo personalmente soy:

Poeta callejero marginal: escritor que no confía en las editoriales, ni en el sistema, ni en el arte y, de hecho, confía en muy pocas cosas. Una de ellas es sí mismo, pues su recorrido solitario e individualista por las calles, los subtes y los bares donde ofrece su material sólo puede basarse en una cuota considerable de autoestima y ganas de volver a auto-leer su obra. Mientras que rechaza las metáforas de la familia y el hogar, vaga por el espacio público sobre el que despliega su estrategia de amor a la nada y miedo a morir sin antes ser leído.